Desde muy pequeño me ha sorprendido la cantidad de personas que hay en el mundo. Las sociedades crecen, siempre lo hacen. (A menudo me pregunto si llegaremos a un punto en el que no podamos crecer mas).

Una sociedad, al estar conformada de individuos, se define por el comportamiento promedio de estos. Cuando la mayoría cree una cosa y actúa sobre esa creencia, moldea la realidad social. Asi, los individuos educados en materia ambiental, cuidarán y disfrutarán de espacios naturales. Por otro lado, aquellos que crean que la basura desaparece del mundo cuando ésta se desprende de sus manos, tendrán calles abarrotadas de desperdicios.

Lo que creemos determina lo que hacemos.

A menudo escucho que lo que sucede en nuestras sociedades es culpa de nuestros líderes y me hace pensar mucho sobre la manera en que abordamos nuestros problemas. Yo creo que lo que determina dónde estamos hoy como sociedad, no es culpa de ellos ni nuestra exclusivamente, si no la suma de las dos.

Hacia un mejor mañana

Hay muchísimos problemas en la sociedad de Mérida: pobreza, contaminación, desigualdad, falta de empleos, racismo, y un largo etc. Pero creo que como ciudadanos es a través de participar en solucionar los problemas simples, los que están al alcance de la mayoría, como podemos ayudar a crear un mejor mecanismo para resolver los otros.

A pesar de nuestras diferencias ideológicas, culturales, religiosas, etc, existen puntos comunes de los cuales nos olvidamos a menudo: el respeto, la empatía, la visión a futuro y la protección de nuestro entorno. Al final se trata del sentido de pertenencia social. Entender que se es parte de un sistema, y que no nos encontramos aislados.

Esperar a que un líder visionario y firme nos guíe hacia el bienestar civil y resuelva nuestros problemas en nuestra ciudad es una utopía. Sobre todo considerando que mientras mas individuos se gobiernan, mas fácil se presenta la avaricia capitalista en las esferas del gobierno. (Lamentablemente muchas veces, los líderes que se encuentran en el poder responden primero a los intereses de quienes lo pusieron ahí y después a las necesidades de la sociedad, aunque no siempre).

Por eso, creo que es mejor actuar primero nosotros en las cosas “sencillas” dejando atrás la pasividad, permitiéndonos así exigir otros asuntos mas complicados a nuestros líderes, y participando en la solución.

la clave esta en los numeros

Cualquier acción sencilla multiplicada por la cantidad de integrantes de la sociedad (mucho mas que los gobernantes) nos lleva a resultados significativos.

Considerando que los problemas que enfrentamos son sencillos en su cotidianidad, pero muy complicados en su extensión, es importante empezar a ser conscientes de la influencia de nuestras acciones diarias e individuales en el colectivo.

Es común que como miembros de este grupo no nos demos cuenta de esto, como se ejemplifica perfectamente en ésta escena de la película “Bichos”.

Bajo esta lógica las acciones más simples, cuando están enfocadas, tienen repercusiones masivas:

Es cierto que todos tenemos intereses y preocupaciones distintos, por lo que es importante ser conscientes de nuestras realidades y nutrirlas con diferentes puntos de vista. El diálogo y la información juegan un papel importantísimo en la cadena de acciones, pero esto no debe detenernos.

Hoy en día contamos con una herramienta poderosa: la hiper conectividad del internet. Sin embargo, muchas veces esta herramienta nos congela en pasividad porque sentimos que compartir contenido es suficiente. (En vez de dejar de tomar coca cola, dejando de contribuir con una cadena de consumo destructiva, puedo denunciar a coca cola en redes y me sentire igual de satisfecho, pero ahorrandome el esfuerzo).

En lo que veo como una sociedad ideal compartiríamos acciones propias en vez de contenidos, y lo haríamos de manera directa, en vivo.

Lo importante es empezar, y eso es algo que podemos hacer desde casa (compostando, sembrando arboles o dejando de consumir electricidad innecesaria). Solamente juntos podemos enfrentar los problemas contemporáneos. Y eso si, estar al pendiente de nuestros gobernantes y exigirles mejores soluciones a nuestros problemas también es parte de esta formula.